Pero,
¿es todo negativo al hablar de temas como las caídas?
Hasta el momento, da la impresión de que queremos desmoralizar
al lector con tantos preocupantes datos pero…¿no hay luz al
final del túnel a medida que analizamos estos “accidentes”?
la realidad es muy diferente, y este pensamiento os queremos
trasmitir esta vez, puesto que, las caídas se pueden prevenir,
y aún habiéndonos caído veinte veces, no quiere
decir que vaya a haber una veintiuna.
Exactamente,
el ejercicio físico puede reducir las probabilidades de que se
produzca una caída en un 15-27%, y en mayor medida, los
programas de prevención pueden reducirlo en un
40%(GINÉ-GARRIGA
& MARTÍN BORRÁS, 2008).
De
hecho, según otro informe (SIELBLEU
CATALUNYA, s.d.) analizando
el mismo
tema, el
ejercicio físico reduce las caídas en un 17%, y en
entre un 20% y un 40% las posibilidades de rotura.
Por
lo tanto, ¿qué hay que hacer para evitar las caídas?
Según (FOGARTY,
2002),
el
ejercicio físico es esencial, ya que reduce el riesgo en un
25-30%, preguntarle al médico sobre la robustez de los huesos
y poner atención en la presión, el corazón, en
los diuréticos para el agua y en los calmantes musculares.